A pesar de los malos resultados económicos del año pasado los programas de desarrollo y las operaciones de carga continuaron durante la pandemia

El aeropuerto de Budapest experimentó su año financiero más difícil en 2020, con unas pérdidas de 110 millones de euros (95 millones de libras), tras su año más exitoso en términos de tráfico de pasajeros en 2019.

Sin embargo, el centro de operaciones declaró que el funcionamiento y la financiación de la empresa siguen siendo estables.

Los beneficios obtenidos en 2019 se destinaron a la gestión de la crisis en el aeropuerto, incluyendo la financiación de parte de la operación con recursos propios y fondos basados en el mercado, por un total de 81 millones de euros (70 millones de libras).

"Tras un año en el que muchas aerolíneas y aeropuertos de todo el mundo han recibido importantes paquetes de ayuda estatal, el aeropuerto de Budapest ha superado con éxito el año 2020 únicamente con sus propios recursos, y actualmente se encuentra extremadamente estable desde el punto de vista financiero", declaró Chris Dinsdale, director general del aeropuerto de Budapest.

"A medida que la pandemia disminuye, vemos un futuro brillante por delante. La recuperación ha comenzado, y hemos empezado a contratar la mano de obra necesaria para ello. El aeropuerto está preparado para acoger niveles moderados de tráfico este verano, mientras que se espera que 2022 vuelva a ser un año de gran actividad, con altos niveles de pasajeros."

El número de destinos atendidos en el hub alcanzó los 153 hace dos años, lo que supuso el mayor número de su historia. Además, el desarrollo de la red de rutas supuso un aumento del tráfico de pasajeros, que alcanzó los 16,2 millones en el mismo año.

Este patrón se mantuvo durante los dos primeros meses de 2020, superando los niveles de 2019 en un 16% y un 15%, respectivamente.

El número de pasajeros comenzó a caer en marzo, con un dramático descenso del 99,3% en abril del año pasado. A finales de diciembre, el tráfico alcanzó el 24% de las cifras del año anterior.

Los ingresos de la compañía ascendieron a 118 millones de euros (102 millones de libras) a finales de 2020, un 65% menos que en 2019.

A pesar de ello, las operaciones de carga alcanzaron niveles récord, mientras que los principales inquilinos que no dependían del tráfico de pasajeros -como el mantenimiento de aeronaves y los integradores- compensaron parte de los ingresos perdidos.

En los dos últimos años también se han realizado obras en el aeropuerto por valor de 167 millones de euros (144 millones de libras esterlinas), y el 50% de esa suma se gastará en 2020.