La decisión fue anunciada el 7 de febrero durante una ceremonia en la base, situada en la provincia argentina de Santa Cruz, a la que asistieron el comandante de la FAA, general de brigada Xavier Isaac, y el ministro de Defensa argentino, Jorge Taiana. Los tres Pampa III fueron transferidos al BAM Río Gallegos desde el Grupo Aéreo 6 de Caza (parte de la VI Brigada Aérea en Tandil) y compartirán la base aérea con el escuadrón residente de de Havilland DHC-6-200 Twin Otter. La FAA busca aumentar su presencia en el sur del país y, en un futuro cercano, la BAM Río Gallegos será actualizada y renombrada como X Brigada Aérea.

Este título lo ostentó anteriormente entre 1984 y 1996, cuando los cazas Dassault Mirage IIIC y Mirage 5PA Mara tenían su base activa en Río Gallegos. Desde 1997, la FAA ha realizado regularmente ejercicios en los que diferentes unidades de Mirage, IA-58 Pucará, Pampa y A-4AR Fightinghawk se desplegaban en la base durante un par de semanas y se les encomendaba la realización de operaciones aire-aire/tierra.

Además, la FAA también está dispuesta a enviar dos helicópteros de transporte táctico Mil Mi-171E Hip-H a Río Gallegos una vez que ambos fuselajes hayan vuelto al servicio operativo tras la finalización de su revisión general. La flota argentina de Pampa aumentará seguramente a medida que más Pampa II se conviertan al estándar Pampa III. Este proceso de actualización se está llevando a cabo actualmente en las instalaciones de Fábrica Argentina de Aviones (FAdeA) en Córdoba.

Si bien el Pampa III no es un caza polivalente, que es lo que requiere la FAA para esta tarea, la plataforma seguirá siendo un activo muy importante para esta región hasta que finalmente se adquiera un caza de cuarta generación. Los aviones operarán junto con los dos radares 3D que ya están operativos en Río Gallegos y Río Grande para controlar y salvaguardar el espacio aéreo en esta zona de Argentina.