Aunque todavía está muy por debajo de las cifras anteriores a la pandemia el tráfico de pasajeros está mejorando en los viajes internacionales y nacionales

La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) ha revelado que la demanda de viajes internacionales y nacionales mejoró en mayo, en comparación con los meses anteriores.

Sin embargo, el tráfico de pasajeros sigue estando por debajo de los niveles anteriores a la pandemia.

La demanda total de viajes en mayo experimentó un descenso del 62,7% en comparación con el mismo mes de 2019, aunque supuso una ligera mejora respecto a las cifras de abril, que registraron un descenso del 65,2%.

La demanda de pasajeros internacionales también cayó un 85,1% en comparación con mayo de 2019.

"Estamos empezando a ver una evolución positiva, con algunos mercados internacionales que se abren a los viajeros vacunados", dijo Willie Walsh, director general de la IATA. "La temporada de viajes de verano del hemisferio norte ya ha llegado por completo. Y es decepcionante que más gobiernos no se estén moviendo más rápidamente para utilizar los datos para impulsar las estrategias de apertura de fronteras que ayudarían a reactivar los puestos de trabajo del turismo y a reunir a las familias."

Y continúa: "Demasiados gobiernos siguen actuando como si la única herramienta de su arsenal contra el COVID-19 fuera un cierre general de las fronteras o una cuarentena de llegada. De hecho, las investigaciones de las principales organizaciones médicas de todo el mundo confirman que los viajeros vacunados suponen muy poco riesgo para la población local, mientras que los datos muestran que las pruebas previas a la salida eliminan en gran medida el riesgo de que los viajeros no vacunados importen COVID-19".

El tráfico internacional de las compañías aéreas europeas disminuyó un 84,7% en mayo con respecto a hace dos años, lo que supone una ligera mejora con respecto al descenso del 87,7% de abril.

Las aerolíneas de Asia-Pacífico también experimentaron una caída en el número de pasajeros, con un descenso del 94,3% en comparación con las cifras anteriores a la pandemia. La región en su conjunto experimentó sus mayores caídas por décimo mes consecutivo, con un descenso de la capacidad del 86,4%.

Comparativamente, la demanda de las compañías norteamericanas en mayo cayó un 74,4%, lo que supone una mejora respecto al descenso del 77,6% de abril. El tráfico de las compañías latinoamericanas cayó igualmente un 75,1%, y las africanas un 71,4%.